“Mis días sin Victoria” y “Gimnastas, atrapados entre el amor y la gloria” forman parte del ciclo del Centro Cultural Recoleta de artistas sub 30. «Gurisa», la nueva obra del actor y director Toto Castiñeiras (Cirque du Soleil) parodia un romance en La Pampa del siglo XIX. Por Gabriela Koolen.
Ciclo Radar en el Centro Cultural Recoleta
El desconcierto de los años de juventud, la incertidumbre y la música de los noventa son algunos de los puntos en común entre las dos propuestas en las que el cuerpo es uno de los grandes protagonistas.
“Mis días sin Victoria” es una obra performática bailada sobre un relato de la bailarina y coreógrafa Belén Arena. A modo de catarsis entre narraciones, coreografías y diálogos con el público, recrea la historia de un amor frustrado, y de una obra que no se montó. “Mis días sin Victoria es un diario que escribí para salvarme, de una obra que nunca hice porque me enamoré de la intérprete”, cuenta Belén Arena.
Con dramaturgia y dirección de la actriz y directora teatral Emilia Dulom, “Gimnastas, atrapados entre el amor y la gloria” apuesta a un formato más tradicional. Cuenta la historia de cuatro amigos que forman un equipo de gimnasia artística. Entre los preparativos de una competencia importante tienen que volver a entrenar juntos luego de un impasse por una pelea entre dos de sus miembros. ¿Podrá más la sed de gloria que los sentimientos?
Funciones:
“Mis días sin Victoria” jueves y viernes a las 21. “Gimnastas”: Sábados 17 y domingos 21. Centro Cultural Recoleta. Junín 1930. Teléfono y mail para informes: 4803-1040. info.ccr@buenosaires.gob.ar
«Gurisa»
La nueva obra del actor y director Toto Castiñeiras -integrante del Cirque du Soleil- fusiona textos poéticos, escenas gauchescas y elementos coreográficos para crear la parodia de un romance ambientado en La Pampa del siglo XIX. Sus protagonistas son arquetipos gauchescos, indios, ingleses, y una esclava negra, quienes viven historias en las que la fantasía y la realidad se confunden. La ambientación aporta a esa confusión: la puesta en escena muestra una Pampa electrificada, en la que la luz va y vuelve.
Allí, en medio de una estancia una hija de terratenientes se debate entre la educación y los instintos. La joven blanca es atraída por uno de sus peones: un gaucho sucio y sin escrúpulos. El triángulo se completa con una pobre gurisa que es llevada cautiva por un indio. El trabajo expresivo corporal es uno de los puntos más logrados de la obra, en la que todos los personajes -incluso los femeninos- son interpretados por hombres.
Funciones:
El Portón de Sánchez. Sánchez de Bustamante 1034. Viernes a las 23. Reservas: 4863-2848 o ingresando en la web: www.elportondesanchez.com.ar
