Las letras encendidas del Quinteto Negro La Boca, la sonoridad andina que evocaba el charango de Jaime Torres, el pulso de Arbolito fueron algunas de las diversas expresiones estéticas que reunieron a miles de espectadores en Plaza Alberti, en el barrio porteño de Belgrano, detrás de una figura: el historiador Osvaldo Bayer, homenajeado sus 90 años.
Bayer nació el 18 de febrero de 1927 en la ciudad de Santa Fe. Vive en Buenos Aires, pero también tuvo que pasar unos años en Berlín, donde se exilió antes de la última dictadura militar (1976-1983). Padeció la censura de los gobiernos de Raul Lastiri y María Estela Martínez y en 1975 se vio obligado a exiliarse a causa de reiteradas amenazas del grupo de ultraderecha Alianza Anticomunista Argentina, conocida como Triple A.
En el festival organizado por el Sindicato de Prensa de Buenos Aires, Bayer fue el centro de las miradas y el receptor de todos los reconocimientos, especialmente de sus colegas periodistas. «De todo lo que he hecho en mi vida, el oficio de periodista es aquello con lo que me siento más identificado. Soy un periodista nato», expresó.
El historiador, autor de obras fundamentales como «Los vengadores de la Patagonia trágica», «Rebeldía y esperanza, Severino Di Giovanni», «La Patagonia Rebelde», fue distinguido como Secretario General Honorario del Sipreba. Ya había ejercido ese cargo en forma activa entre 1959 y 1962, en otro tiempo del gremio de prensa.
El festival fue inaugurado por el «Quinteto Negro La Boca», agrupación surgida a mediados de 2008 con la intención de rescatar, a través del tango, el patrimonio cultural del barrio y con eje en el rescate de figuras como Pedro Láurenz y Juan de Dios Filiberto. Una de sus obras más populares es «Tangos Libertarios», su tercer disco, presentado como una suerte de ópera anarquista. Con letras del propio Bayer, este trabajo recorre muchas vidas e historias de resistencia de luchadores sociales.
«Es una opereta que tiene la pluma de Osvaldo, un referente para nosotros. Y musicalmente se asienta principalmente sobre el tango, pero también atraviesa otros géneros como la murga, la música contemporánea, el rock y el rap», dijo Pablo Bernaba, director y primer bandoneonista de la formación.
«Las putas de San Julián» y «Chau Falcón, gracias Simón» fueron algunas de las letras que inauguraron el programa musical, que luego sería continuado por Arbolito, Horacio Fontova, Jaime Torres, Rolando Goldman y su orquesta de charangos, entre más.
Bayer asistió a los festejos desde la primera fila, acompañado por familiares y representantes de diferentes organizaciones sociales y políticas; entre ellos, Nora Cortiñas y Mirtha Baravalle de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.
Bayer eligió, entre sus palabras, enfatizar la lucha de los trabajadores de la planta gráfica AGR-Clarín, que mantienen ocupado el establecimiento en rechazo al despido de 380 empleados. «Les deseo mucha fuerza y que cumplan con el sueño que siempre tuvimos: que hagan una cooperativa. Yo trabajé tantos años en Clarín. Tomen el diario y hagan una cooperativa. Es lo más hermoso, lo más democrático y lo más popular que pueden hacer», aseguró.
Fuente y fotos: Télam