Tierra del Fuego, Canal Beagle, deportes, natación

Conocé a Santiago, el cordobés que cruzó a nado el Canal Beagle

«Tengan confianza y no se rindan», aconsejó el cordobés Santiago Gutierrez luego de cruzar a nado el Canal Beagle de Ushuaia sin protección térmica y soportar los 7 grados de temperatura que tiene el agua. Santiago tiene 40 años y perdió la movilidad de sus piernas durante un accidente de tránsito en 2012, pero ello no le impidió sumergirse el 5 de febrero en las aguas heladas del Beagle y nadar 1,8 kilómetros entre Cabo Peñas (Chile) y Puerto Almanza (Argentina) en 45 minutos.

“El agua del Canal Beagle tenía una temperatura de entre 7 y 8 grados, pero no me molestó. No tuve ningún problema físico. Al contrario, lo disfruté mucho. Era impresionante parar y ver las montañas, y hasta los pingüinos y unas ballenas que estaban cerca”, contó Santiago en diálogo con Télam.

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“Habrá personas indiferentes a este logro, aunque puede ayudarle a quienes tienen alguna discapacidad y quieran mejorar su calidad de vida. A ellos les digo que pidan ayuda, que no se encierren, que guarden su falso orgullo y que tengan fe en Dios”, reflexionó el nadador, quien era guardavidas cuando sufrió el accidente.

Santiago es de la ciudad de Villa Carlos Paz, provincia de Córdoba. Tuvo una vida ligada al deporte hasta que el destino lo marcó en 2012 con un accidente automovilístico que le ocasionó una parálisis de sus miembros inferiores. Lejos de ser un impedimento, Santiago decidió continuar con su vida activa como atleta, no sólo para plantearse desafíos en lo personal sino para valerse de su nueva condición y ser un verdadero ejemplo de vida y motivación para quienes padecen condiciones similares.

Con un espíritu que se proyecta en su sonrisa, apoyo invaluable de su entorno y una voluntad que parece no entrarle en el cuerpo, llevó adelante un sueño: vivir y disfrutar cada instante al máximo a través de la vida deportiva y distintos desafíos.

Arribó a Ushuaia el martes 31 de enero , y desde su entorno comentaron que “apenas llegó, lo primero que quiso fue meterse al agua”. Desde ese día realizó tareas de entrenamiento para el cruce del Canal Beagle y aclimatación en la zona de Playa Larga, con el apoyo de referentes en la disciplina como lo es el experimentado nadador de aguas abiertas Walter Ruano, entre otros.

Para el cruce del Canal Beagle contó con un dispositivo construido especialmente para fijarle las piernas y dar flotabilidad parcial .

”Me vi inspirado en realizar este cruce del Canal Beagle a partir de haber visto un video de Camilo López, nadador, con quien terminamos siendo amigos. Vi que era posible hacerlo, que él no era un deportista de alto rendimiento entonces consideré que estaría a mi alcance», explicaba Santiago al Diario del Fin del Mundo.

Respecto a la etapa previa y la preparación necesaria recordó que “todo esto empezó a entrar en un ritmo serio. Comencé a nadar en invierno en Villa Carlos Paz, en distintos balnearios. El agua fría tiene eso de especial y espectacular, creemos que el nado en agua fría debe y puede ser disfrutado”.

Para lograr esta proeza, Santiago no estuvo solo. “Me acompaña Silvana, mi novia; también tengo el privilegio de que lo haga en calidad de guardavida el Profesor Carlos Nieto, de cual fui alumno y fue quien me ha acompañado en cruces anteriores en kayak; Por otro lado está Camilo (López) que fue instruyéndome; Walter Ruano, referente local; y además Diana (Méndez) con su marido Sergio, aportando la logística con sus embarcaciones».

 

“Ahora tengo otro sueño. Me gustaría nadar en las Islas Malvinas. Unir las dos islas o hacer un trayecto frente a Puerto Argentino. Ese es mi nuevo desafío”, anunció Gutiérrez.

 

Fuente y fotos: Télam