La Universidad Tecnológica Nacional (UTN) inauguró en su sede de la ciudad mendocina de San Rafael un laboratorio de isótopos estables que ofrecerá servicios al país y al extranjero en temas vinculados con las ciencias básicas como cambio climático, dieta humana o migraciones y al sector productivo para la certificación de denominación de origen en distintos productos del agro.
El antropólogo Adolfo Gil, quien trabaja en la UTN San Rafael, explicó que la nueva tecnología servirá a la ciencia forense para identificar la procedencia de algunos individuos. “La capacidad de este equipo es tal que los límites de lo que se puede hacer con él están en la imaginación de cada investigador”, dijo Gil”.
Ya instalado y operativo en la sede San Rafael de la UTN, el nuevo equipamiento de isótopos estables dará servicios a distintos centros de investigación de Argentina y América del sur.
Los isótopos estables, si bien son conocidos y utilizados desde hace varias décadas, han generado una revolución en el conocimiento y sus aplicaciones en los últimos quince años ya que se han extendido al campo de la biología, agronomía, antropología, ciencias forenses, arqueología, paleoclimatología, petróleo y agroindustrias, entre otras disciplinas.
Algunos de sus usos
Desde la UTN detallaron que los isótopos estables sirven para reconstruir cadenas tróficas y conocer distintos tipos de dietas, y como ejemplo mencionaron que “están siendo utilizados para determinar en qué lugar del océano Atlántico se alimentan las ballenas que arriban todos los años a Península de Valdés”.
Son utilizados también para detectar adulteraciones de vinos ya que permiten conocer qué tipo de azúcares fueron utilizados para la creación del alcohol (caña de azúcar o mosto de uva) o la adulteración de aceites u otros alimentos; y realizar estudios de trazabilidad que posibilitan establecer el origen de determinados productos vegetales, como por ejemplo de que región del país provienen las aceitunas utilizadas para la confección de un determinado aceite de oliva.
Los isótopos estables
Los isótopos estables son elementos químicos de igual composición (mismo número de electrones) pero diferente número de elementos en el núcleo (neutrones y protones). Además, a diferencia de los isotopos inestables como el uranio 238 o el conocido Carbono 14, los isótopos estables se mantienen constantes a lo largo del tiempo, lo que permite que sean medidos en muestras de miles de años de antigüedad.
Este equipo en su primera etapa será utilizado para medir Carbono 13 y Nitrógeno 15, dos elementos muy comunes en cualquier forma de vida.
En San Rafael, el departamento de Antropología del Museo de Historia Natural trabaja desde hace años dentro de esta línea identificando a partir de los huesos humanos el tipo de alimentación que consumían los antiguos pobladores de Mendoza y cómo su dieta fue cambiando a lo largo del tiempo.
Así fue posible monitorear el ingreso del maíz (planta doméstica) a la región hace alrededor de 1500 años.
Además, estudios de isótopos de Oxígeno 18 que permitieron conocer de dónde sacaban el agua que consumían estas poblaciones durante los últimos 8000 años y así reconstruir antiguos circuitos de movilidad.