En un domingo con nubes y alguna brisa fresca se realizó la segunda edición de «la Pizza más larga», donde las pizzerías más tradicionales amasaron una grande de mozzarella de 60 metros a pasos del Obelisco, con el objetivo de promover la inclusión laboral de las personas con síndrome de Down. Este año superaron en diez metros al récord batido en 2014.
Los encargados de cocinar la pizza más larga de Buenos Aires fueron los comercios agrupados en la Asociación de Propietarios de Pizzerías y Casas de Empanadas (Appyce) y la venta estuvo a cargo de integrantes de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (Asdra), una asociación de familias de personas con síndrome de Down que hace más de 27 años trabaja por la inclusión en el hogar, la salud, la educación, el empleo y la vida independiente.
La actividad es a total beneficio de Asdra y las porciones fueron comercializadas por unos 20 jóvenes y adolescentes con síndrome de Down, que ejercieron “un rol activo, trabajando con los pizzeros”. Las porciones costaban 20 pesos y venían acompañadas con un vaso de gaseosa. «Pasaron algo más de 5.000 personas y vendimos 3.000 bonos de la pizza que repartieron los chicos», señaló a Télam Soledad Bugacoff, responsable de comunicaciones Asdra.
El evento contó con un show de magia inclusiva, un espectáculo musical, la actuación de un acróbata pizzero, entre otras propuestas. La iniciativa fue organizada por Appyce, con el apoyo de la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Asociación Amigos de la Avenida Corrientes.
«El saldo es muy positivo porque pudimos llegar a un montón de gente. La participación de los chicos es muy activa, trabajaron junto a los pizzeros, vendieron los bonos y atendieron a la gente que se acercó», agregó Bugacoff.
Fuente y fotos: Télam