Estrellas de rock convertidas en leyendas, adolescentes fanáticos que entran en trance en recitales, rituales de sacrificio, mundos subterráneos y abiertos al mar. La nouvelle de Mariana Enriquez es un híbrido de géneros y referencias múltiples, destinada a un público intergeneracional. Por Andrés Buisán.
Al punto vuela por todas las grandes ciudades líbicas la Fama,
el más rápido de los males.
El movimiento es su vida, y agitándose cobra fuerzas.
Humilde primero y temerosa, bien pronto crece asombrosamente:
Sus pies tocan el suelo y su cabeza se esconde entre las nubes.
Dicen que la Tierra, en su furioso odio a los dioses,
dio a luz a esta hermana menor de Encélado y de Ceo,
ligera de pies y de rápidas alas.
Virgilio, La Eneida
La trama de la novela nos invita a sumergirnos en el fanatismo musical aparentemente adolescente. James Evans es el cantante de la banda Fallen, que ha alcanzado a miles de seguidores. La nouvelle transcurre del salto a la fama y el sacrificio de una adolescente determinado por Helena, especie de hada convertida en secretaria del cantante, hasta el show 350 de la banda, en una gira incansable de dos años.
Las Luminosas viven en un mundo paralelo al de los humanos. Son criaturas que tienen la misión de convertir en Leyenda a músicos. Allí están las hacedoras de Sid Vicius, Jim Morrison, Jhon Lennon y Kurt Cobain. Ellas se alimentan de esa leyenda: viven de la muerte. La misión de Helena es convertir en leyenda a James. Sus vicisitudes pasan por el afecto que le va tomando y, entre otras cosas, la intriga por el tipo de muerte que le dará: por qué las otras Leyendas murieron en soledad ya siendo Estrellas. ¿Cuál es la muerte para James?
Además de las Luminosas están las Imago. Si aquellas viven de la fama, estas últimas del silencio. La disputa entre ellas es un péndulo que oscila entre el recuerdo y el olvido. Así, podríamos decir que la nouvelle introduce una reflexión teórica que va de la consagración canónica –musical, literaria- al olvido histórico. Si las Imago ganan, Helena y las demás Luminosas están en riesgo. El olvido de James es la muerte para Helena, pero la muerte legendaria de James es la vida de ella.
La nouvelle es intergeneracional porque si bien encontramos una temática que a priori podemos juzgar como adolescente y vinculada con una estética del fantasy y gótico en boga en la actualidad en ese rango etario, la nouvelle está cargada de referencias para una generación hoy adulta. Esto nos indica que el fanatismo musical adolescente de hoy, por ejemplo de youtubers, no es exclusivo de la actualidad. Quizás por esto no encontramos un tono irónico de distancia o paródico ni hacia el fanatismo ni hacia la adolescencia.
Por otra parte, el ambiente del mar, las casas abandonadas, las mansiones se mezclan con la literatura urbana de drogas y personas viviendo en situación de calle. Helena es un personaje que vive en los dos mundos. La vemos con las Luminosas frente al mar, pero también trabajando como secretaria de James. Ella sabe su misión, no siente, pero no puede evitar contagiarse de lo humano, lo que puede poner en peligro su objetivo y su vida: dudas, emociones, amor, celos. Así la mitología que se construye alcanza un arco muy amplio de referencias: desde la mitología griega, pasando por el fantasy, lo gótico, lo urbano y los ritos de de pasaje.
Éste es el mar es una nouvelle entonces que tematiza un fenómeno sociológico de la sociedad de mercado actual, pero también, al inscribirlo en un ambiente mítico, nos hace reflexionar sobre nociones atemporales: la vida, la muerte, la fama –que ya era un personaje mitológico en la antigüedad griega y latina-, y con ella, la memoria o el olvido.
Éste es el mar, de Mariana Enriquez, 2017, Random House Mondadori, 128 páginas.