Seis chef argentinos fueron seleccionados por la Academia Culinaria Francesa por su trayectoria, por el cuidado de la auténtica cocina francesa y por sus emprendimientos locales e iniciativas docentes en Argentina.
“La Academia tiene como objetivo hacer brillar los productos y a la cocina francesa pero también promover el arte culinario a través de los productos del territorio”, aseguró Fabrice Prochasson, presidente de la academia, quien además nombró a Graciela Hernández como delegada para la Argentina y Uruguay.
Hernández, quien hace 40 años se dedica a la docencia y tiene una escuela de gastronomía en Luis Guillón, sur del conurbano bonaerense, fue miembro de la Academia hace ocho años. “La academia en la Argentina está creciendo y mi idea es que seamos más chefs, duplicar el cupo que tenemos asignado para llevarlo de ocho a nueve miembros anuales”, dijo tras recibir el reconocimiento.
Indicó además que “la Argentina está en los primeros puestos de la academia. Los chef argentinos son muy reconocidos a nivel internacional y tienen la facilidad de sacar un plato adelante aunque les falte un ingrediente”, aseguró.
Los flamantes miembros de la Academia Culinaria de Francia son Federico Gastón Domínguez Fontán; el patissier Roberto Goni (director y propietario de la Escuela de Pasteleros); el chef ejecutivo Germán Ruberto (Hotel Panamericano); el chef instructor Christian Hernán Prieto (Instituto General de Gastronomía); el chef Claudio Adrián Solitario (director de Estudios de Nueva Cocina Argentina); el chef ejecutivo Jean-Baptiste Pilou (Restaurante Fleur de Sel, Belgrano); el chef ejecutivo Kaywa Hilton Melik (Hotel Sofitel Carrasco) y el chef Mauro Damián Jones(Hotel Sofitel Carrasco).
La delegación argentina de la Academia selecciona y recomienda una veintena de candidatos a futuros integrantes, que deben ajustarse a ciertos parámetros, más allá de ser excelentes cocineros.
Otro de los grandes premiados de la noche fue el chef anfitrión, Diego Irato, quien ya era miembro de la academia y mereció un reconocimiento especial por su larga trayectoria y por su entrega a la gastronomía.
“Mi satisfacción más grande pasa por haber elegido este camino desde muy chico y seguir trabajando en lo mismo. Y este premio motiva porque es algo muy objetivo, sin influencia de la gastronomía local y muy serio a nivel mundial”, aseguró Irato tras recibir la distinción.
Fuente: Télam