Puna, estaciones meteorológicas, clima, ecología

Instalaron quince estaciones meteorológicas en la región de la Puna

Investigadores instalaron en la región de la Puna una red de 15 estaciones meteorológicas que brindará información en tiempo real. La idea surgió por el aumento de fenómenos extremos -como tormentas intensas- y la falta de datos sobre el clima de esta región.

A comienzos de 2017, mientras el fenómeno meteorológico del Niño provocaba fuertes lluvias en la región pampeana, la Puna registraba una intensa sequía que aún sigue afectando a las comunidades locales y que promete complicar aún más la situación a partir de abril, cuando finaliza el período de lluvias. No sólo están comprometidas la producción de los pastizales y la ganadería, sino también la superficie de los frágiles suelos de la zona, que sufren la erosión.

La sequía puso en alerta a pequeños productores que están solicitando ayuda para afrontar la escasez de agua

Puna_inundacion2014-063-768x1024“En la Puna hay muy pocos datos actualizados de precipitación. La información está dispersa y no siempre está sistematizada. En las estaciones meteorológicas no hubo un seguimiento ni control para recolectar datos y no conformaron una red”, afirmó Alejandro Maggi, investigador de la Facultad de Agronomía de la UBA, quien participa desde esa institución en la comisión directiva del Observatorio Nacional de la Degradación de Tierras y Desertificación (ONDTyD).

Maggi y su equipo de investigadores dirigen, junto con organismos locales, dos estaciones meteorológicas en el Valle de Santa María Catamarca y en Laguna de los Pozuelos. Ambos sitios piloto pertenecen a una red de 15 estaciones meteorológicas automáticas del ONDTyD que ya están en funcionamiento y que integran el trabajo de investigadores del Ministerio de Ambiente de la Nación, el INTA, el Conicet, universidades nacionales y asociaciones civiles.

“El conocimiento sobre las precipitaciones, a partir de los datos que proveen las nuevas estaciones, es importante porque está estrechamente relacionado con la producción de los pastizales y la degradación de las tierras. La idea es sistematizar, recolectar y publicar los datos, y con ello poder anticiparnos a escenarios futuros, entendiendo cómo funcionan las variables del clima”, explicó Maggi.

En marzo de 2017 el investigador viajó a la provincia de Jujuy para ofrecer una capacitación sobre la instalación de una nueva estación en el Monumento Natural Laguna de los Pozuelos. Hasta ahora solo existían dos estaciones de esta red en la puna de Jujuy. “La tercera estación ya está instalada en Laguna de los Pozuelos y está proveyendo una información inexistente hasta la fecha, con datos de precipitación, vientos, temperatura y de radiación que pocas estaciones pueden medir”, explicó Maggi.

“La Laguna de los Pozuelos casi se secó. Deberíamos intentar explicar las causas, ayudar a predecir estos fenómenos y acompañar a la comunidad, dando soluciones o previsibilidad”.

Cambio climático

El cambio climático acentuó la intensidad y la frecuencia de los fenómenos extremos: “En la Puna, como en la mayoría de las zonas áridas y semiáridas, llueve poco pero concentrado y los fenómenos son más intensos. En un área donde los suelos son frágiles de por sí, porque son franco arenosos (en el mejor de los casos) o arenosos, con altas pendientes (cuando los escurrimientos vienen de la montaña, que pueden ser de 45 grados), se producen grandes cárcavas. Una lluvia intensa después de una época seca y con baja cobertura vegetal, con suelo casi desnudo, tiene más posibilidades de producir procesos de degradación”.

 

Por Juan Manuel Repetto, Prensa y Divulgación de CyT. Facultad de Agronomía (UBA)