Cáncer de máquina: un documental diferente en las salinas

Luego de proyectarse en diferentes partes del mundo, el 19 de mayo se estrena en Buenos Aires el documental realizado por Alejandro Cohen Arazi y José Binetti: «Cáncer de Máquina» Postales de un desierto bonaerense. Un documental que muestra, desde adentro, la irrupción de las máquinas en las silenciosas salinas de localidad de Médanos, al sur de la provincia de Buenos Aires.

Afiche mail«La vida cotidiana de una pequeña comunidad industrial que vive aislada en una salina, al sur de la provincia de Buenos Aires, se ve alterada cada año por la cosecha de sal: cientos de camiones, palas mecánicas, cosechadoras y otras bestias metálicas invaden el paisaje creando una danza fantástica entre la naturaleza y la máquina. Una vez concretada la cosecha, la vida cotidiana de los pobladores intenta recomponerse para volver a sus rutinas.

Los pocos habitantes permanentes del lugar llevan una vida signada por la soledad y el aislamiento: un cazador solitario, un hombre que ama su tractor, una familia venida de muy lejos, otra de campesinos, un matrimonio de profesionales. El entorno natural es una constante que se funde con los habitantes de la salina, hasta que las grandes máquinas vuelven a invadir el lugar».

Alejandro Cohen Arazi estudió en el Instituto de Arte Cinematográfico de Avellaneda, al sur del conurbano bonaerense. Realizó cortos y largometrajes, documentales como «Comunidad de Locos»; «Cuarenta Balas»; y «Víctimas de Tangalanga» en 2016, del que también es asistente de dirección. José Binetti, oriundo de La Pampa, es sonidista, músico, iluminador y estudió guión. 

En la Reseña oficial de BAFICI, David Obarrio afirma que «es una película intrigante. Los directores tienen la audacia suficiente para pasar del retrato diseñado y moldeado a escala humana, a los enigmáticos planos detalle de sapos que cazan insectos en la oscuridad»

Sobre el documental
Se demuestra la vigencia irreductible del cine documental como un medio de exploración de la condición humana y de divulgación para el enriquecimiento de la cultura universal. Así como en sus orígenes el cine tuvo el atractivo de llevar al espectador imágenes en movimiento de lugares y culturas exóticas y sorprendentes, en un mundo aún con rincones para descubrir; en la actualidad el cine documental sigue teniendo ese potencial revelador, de acercarnos pequeñas y grandes historias, lugares tan fantásticos como reales.

José Binetti cuenta su historia: «Nací en la provincia de La Pampa, mi infancia fue en el pueblo de Macachín, donde mi padre trabajaba para una salinera en Salinas Grandes. Desde muy joven la imagen de la salina fue algo natural para mí. A los diez años vinimos a vivir a la Capital Federal, donde nunca antes había estado. El choque de paisajes y tipo de relaciones es algo que marcó mi adolescencia y me hizo cuestionar lo profundamente arraigado que esta el concepto de “centro del país” que tenemos los argentinos con respecto a la capital federal.

Comencé a escuchar y recuperar los sonidos de la salina: sonidos que remiten únicamente a ese paisaje y noté que la combinación del silencio con los sonidos de las maquinarias construye una banda sonora única. El material de que esta hecho el lugar (cristales de sal) logran dar una cantidad de posibilidades estéticas a la hora de construir la banda sonora que ningún otro lugar que conozco produce. La combinación de estos sonidos y los movimientos de las maquinarias dentro del espacio se nos develó como una danza mecánica».

Alejandro comenta que «cuando conocimos a los habitantes y trabajadores de la salina, encontramos en ellos una sinécdoque de nuestra sociedad. Vimos en su realidad una pincelada de nuestra historia, y en su actualidad están presentes las huellas del pasado que conformó la nación argentina, aún activas: en un reducido páramo conviven hacendados, trabajadores rurales, profesionales universitarios de extracción urbana, obreros calificados, jubilados, valores religiosos, migrantes, y la educación básica formal, entre otras cosas. También nos maravilló el entorno natural, y buscamos que ese ecosistema fuera un protagonista de la historia.

Para ver el trailer

Estreno en Buenos Aires 19 de mayo: Cine Gaumont. Rivadavia 1635. Ciudad de Buenos Aires.