Por sus milagros el cura Brochero será nombrado santo

José Gabriel del Rosario Brochero, apodado el cura gaucho, nació en Villa Santa Rosa, provincia de Córdoba, un 16 de marzo de 1840. Su último milagro fue legitimado como tal por el papa Francisco, quien el próximo 15 de marzo comunicará la fecha de canonización del cura argentino que dedicó sus 73 años de vida al sacerdocio, convirtiéndose así en el segundo Santo argentino de la historia.

Junto a la fecha de la esperada canonización del primer santo nacido y muerto en la Argentina, también se anunciará la de la Madre Teresa de Calcuta.

Su vida

El 4 de noviembre de 1866 se ordenó sacerdote y desempeñó su ministerio sacerdotal en la catedral de Córdoba. Luego fue prefecto de estudios del colegio seminario Nuestra Señora de Loreto. Ya en 1867, Brochero se destacó por su entrega en la asistencia de los enfermos y moribundos de la epidemia de cólera que azotó a la ciudad de Córdoba.

El 19 de noviembre de 1869 fue elegido vicario del departamento San Alberto, conocido hoy como el valle de Traslasierra, con sede en la localidad de Villa del Tránsito que a partir de 1916 llevaría su nombre. El 24 de diciembre de 1869 partió de la ciudad de Córdoba para hacerse cargo del curato. Allí, asumió como propias las necesidades de la gente: con sus manos construyó iglesias y capillas, levantó escuelas y abrió caminos entre las montañas, animando a los pobladores a acompañarlo.

En su vejez el padre Brochero enfermó de lepra como resultado de convivir con enfermos que padecían esa enfermedad, compartiendo inclusive el mate con ellos. Por esa razón quedó sordo y ciego antes de morir, en 1914.

El proceso de canonización se inició en la década de 1960. Fue declarado venerable por el papa Juan Pablo II en 2004. El 10 de mayo de 2012, una junta médica declaró que la recuperación del niño Nicolás Flores, que estuvo al borde de la muerte con pérdida de masa ósea del cráneo y masa encefálica como resultado de un accidente automovilístico sufrido en Falda del Cañete, Córdoba, el 28 de septiembre de 2000, carecía de explicación científica.

Su padre, Osvaldo Flores, había pedido a Brochero que intercediera por la vida de Nicolás. El 7 de julio de 2012 se reunió una comisión de teólogos para observar el caso del supuesto milagro atribuido a la intercesión del venerable cura Brochero. Los integrantes se expidieron positivamente en forma unánime.

En octubre se reunió en sesión ordinaria una comisión integrada por obispos y cardenales que estudiaron todo el proceso canónico y las conclusiones fueron elevadas al papa Benedicto XVI por el prefecto de la Congregación Pontificia para la Causa de los Santos, el cardenal Angelo Amato. En 2012, Benedicto XVI firmó el decreto de beatificación que validaba el milagro de Brochero. La ceremonia de beatificación tuvo lugar en la pequeña localidad cordobesa de Villa Cura Brochero el 14 de septiembre de 2013, durante el pontificado del papa Francisco. La ceremonia fue presidida por el cardenal Angelo Amato, con la participación de 200 mil fieles.

La recuperación de la niña sanjuanina Camila Brusotti luego de haber sido golpeada por su madre y su padrastro y de sufrir un infarto masivo en el hemisferio cerebral derecho, se consideró como un hecho extraordinario por parte de una junta de siete médicos, y como un milagro por parte de un tribunal eclesiástico de Roma. Según la Comisión Teológica, ese hecho se produjo por la intercesión de Brochero, la primera persona nacida y muerta en la Argentina considerada santa por la Iglesia católica. 

El primer santo oficializado por el Vaticano y nacido en Argentina es San Héctor Valdivielso Sáez, conocido como San Benito de Jesús. Nació en 1910  y a los cuatro años fue llevado por sus padres a España, donde fue ejecutado 24 años después durante la Revolución de Asturias.