Omar Vitullo es la cara del restaurante Don Carlos, epicentro nocturno de los artistas: uno de los pocos lugares que cubre la demanda de los actores que, por trabajo, cenan a partir de las doce de la noche.
¿Por qué dejaste la actuación para dedicarte a la gastronomía?
Nunca dejaré de ser actor, llevo 43 años de carrera. Estar en Don Carlos como gerente es responsabilidad del mi amigo Sergio D´Agostino, quien lo compró y lo tomó a partir del 1 de Enero de 2015. Es un querido amigo y me entusiasmó para estar al frente. Mis dotes actorales se siguen poniendo en juego cada vez que se abre la puerta y recibo a los comensales: les muestro el lugar, se toman una foto, les alcanzo su copa de champagne y conversamos como si nos conociéramos hace mucho.
¿Cuál es la relación de Don Carlos con la farándula?
Los artistas siempre tienen lugares favoritos de cena para antes y sobre todo después de la función. Don Carlos es uno de ellos, ya está posicionado así. Yo conozco a muchos artistas y muchos nos eligen también porque me conocen y saben que estoy acá. Lo mismo sucede con la prensa, que me reconoce por mi tarea actoral.
¿En qué se renovó Don Carlos?
La propuesta de Don Carlos es la comida española, pero ahora se incorporaron tragos y aperitivos de entrada, jamón serrano de Espańa y un carrito de postres, muy solicitado sobre todo por las familias con chicos, que no encuentran esta opción en otros lados. D’ Agostino realizó una inversión muy importante para la puesta en valor del espacio arquitectónico. Lo mejor es que preparó un personal de mozos y cocina de primer nivel, con muchas horas de trabajo y formación. Así se puede competir en el mercado gastronómico actual, con calidad, trabajo duro y trayectoria.
¿Te sentís maestro de ceremonias?
De algún modo lo soy, porque estoy en todas partes y en cada detalle para que cada vez que alguien elige Don Carlos para comer salga con la misma impresión: toda nuestra atención se la dedicamos.
¿Tu plato favorito?
El cochinillo y la paella a la Valenciana son muy buenos. Pero a mí me gusta el pollo al oreganato acompañado de un buen Malbec.